4 Razones para consumir alimentos ecológicos

Consumir alimentos ecológicos está de moda, sobre todo entre un público juvenil con hijos y una formación universitaria o similar. En los últimos años los alimentos marcados como “bio” están ganando terreno en los mercados como una alternativa más saludable para los usuarios y respetuosa con el medio ambiente, en general, y los ecosistemas donde se producen, en particular. No en vano, un estudio europeo llevado a cabo entre los años 2004 y 2009 descubrió un 90% más de vitamina C en las frutas y hortalizas ecológicas.

Desde Alacena Ecológica, tienda de alimentación ecológica online, ofrecen varias razones más por las que deberíamos incorporar, si aún no lo hemos hecho, los alimentos ecológicos a nuestra dieta diaria.

1. Contienen menos pesticidas.

Para que un alimento sea clasificado como “ecológico” debe cumplir una serie de requisitos, entre ellos, que no se emplee ningún tipo de pesticida o abono químico en su producción sino productos de naturaleza orgánica. Se ha demostrado que la agricultura tradicional puede recurrir hasta 400 tipos de plaguicidas diferentes (fertilizantes sintéticos, aditivos, conservantes…), muchos con sospecha de ser alérgenos e incluso cancerígenos. De hecho, muchos de los productos que podemos encontrar en los supermercados contienen algún tipo de residuo.

2. Son más saludables.

Al ser cultivados de un modo natural, en suelos de cultivo libre de fertilizantes químicos y respetando el ritmo de la naturaleza, las frutas y hortalizas ecológicas mantienen todas sus propiedades, la mayoría muy beneficiosas para el organismo. Un ejemplo de ello es el aceite de oliva ecológico, todo un antioxidante natural que reduce cerca de un 70% el riesgo de problemas de circulación.

Al no contar con residuos artificiales, estos productos son asimilados sin ningún problema por el sistema metabólico humano. Cabe destacar que en la agricultura ecológica, por normativa legal, no están autorizados los alimentos genéticamente modificados, algo que ha provocado muchas veces que solo se cultiven determinadas especies por ser más rentables que otras, evitándose así la desaparición de alguna de ellas.

3. Tienen mejor sabor

Los productos ecológicos, gracias a su producción respetuosa con el medio ambiente, conservan mucho mejor su sabor natural frente a los que son cultivados en invernaderos o en terrenos donde se les aplica sustancias químicas que aceleran su crecimiento. Por tanto, estos alimentos conservarán no solo su sabor, sino su aroma y colores tradicionales.

Una práctica muy recomendable cuando acudas a tu tienda de alimentación ecológica habitual es comprobar en su etiquetado que los productos cumplen con los estándares establecidos.

4. Respetan el medio ambiente

Básicamente, el cultivo ecológico se caracteriza por no contaminar ningún entorno (tierra, agua y aire, ya que no se emplean aerosoles tóxicos y emitir menos dióxido de carbono). Además, en lo que respecta a la ganadería, los estándares de control de calidad exigen que las diferentes especies sean criadas en granjas que garanticen su crecimiento natural en régimen de semilibertad y en unas condiciones adecuadas que eviten su estrés. Asimismo, este tipo de crianza vela por preservar las especies autóctonas